.

El sonido de tu radio se ha convertido en una actividad preliminar antes de dormir, mamá.

Me gusta pensar en el destino sin tener nada claro y no entiendo el por qué de este grano.

Cuando te escucho en la cocina pienso si llorarás en silencio o si solo te suenas, siempre creo que es lo primero y me pone triste.

.

Hola.

.

Si, porque me apetece.

Si, no me apetece eso otro, mientras, intento moldear mi mente, darle una forma que ni yo misma sé.

Que ilusos somos, dicen que no se puede sin esa clave pero es cierto que cuando viene y ya pesa, pensamos en un no rotundo, luego se desgasta ese no y pasa a ser un sí afirmativo de nuevo y así continuamente. Girando y girando, sin cesar.

.

Aquella noche lloré, fue una sensacion extraña, partía de la felicidad y lo envolvía una tristeza. Tu dormías y a mi me costaba coger más el sueño, fue una de las cosas que pude almacenar en poco tiempo, aparte de otras más.

Un parrafo al azar de una página abierta aleatoriamente dice: desaparece la cabeza, y la puerta se cierra, pero el individuo sigue hablando en voz alta y aguda, dentro.

.